LA IMPUNIDAD DEL OLVIDO, A mi padre, el poeta Juan E. Gonzalez

Tu memoria, frágil diadema de lluvia
hoy se nos antoja esquiva;
tangente a tu hábil discurso,
antaño implacable heresiarca
que guardaba puertas heraldas
de bibliotecas fecundas.

El sol, en su frontispicio magmado,
talla con saña impasible
los astros que asoman fugaces.
La memoria, tuya y mía
no se perderá, por todo esto,
porque aunque ya no las nombres,
ni las saques de paseo, tus palabras
danzan libres,
con sexo hambriento de folios.

Tu eres las palabras y también las hojas.
Yo, simplemente, tome todo ello prestado.


A mi padre, que es, en definitiva, el dador de todo esto.

DANIEL GONZALEZ SORIA
ABRIL DE 2013

Comentarios

  1. Qué privilegio tener el don en la entraña para recoger los hilos de la trama, ahora que lo tienes en la mano, quédate asido firme, sin dudas ni tropiezos. Ese poder de rescate y continuidad nunca abandona!

    ResponderEliminar
  2. Gracias. Ha sido una tarea ardua, pero ya va saliendo algo con forma y discurso.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares